Encerrada en un cuadrado de 2x2... te miro ahí, a diario, preguntándote...
tienes la misma mirada, el mismo gesto... y se me volvió casi hobby,
tu respondes con las ganas que tengo yo para levantarme de la cama,
y siempre tu curiosidad va en aumento, cada día... cada minuto, lo sé.
Puedo verte andar por ahí, caminando lento o de prisa... siempre ahí,
ya no me miras, ya no llenas aquella banca cercana o lejana de mi.
A veces lo mínimo que tienes también se termina, sin que tu lo sepas...
y me ahorro un par de horas no yendo a donde se que no estarás,
me pregunto si al menos una vez te has detenido a ver bien mis ojos,
y andas por ahí, sonriendo a todo el mundo, y huyendo de todo el mundo.
Dame tu receta, esa para ser feliz con cosas simples como correr con el perro,
esa con la que nadie se da cuenta de que lloras a diario, dime, que hago?
Quieres un poder que te de la posibilidad de dejar de sentir,
y yo te digo que ese poder te haría igual de indiferente que el resto,
que yo no cambiaría tu sensibilidad por que eso es perfecto
te gusta saberlo y sonríes... y mencionas que las palabras son hermosas.
No tienes que ser de hierro para ser mas feliz
ni tienes que callarte sentimientos, ni fingir que siempre estas bien,
no tienes que dejar de creer en las personas ni sentir miedo,
y aunque yo lo digo... yo me siento igual que tu, también le temo a la gente,
y se que no morirás sin que yo te diga todo aquello
y sé que si deseas que yo hable pronto ese algo intangible me hará ir y decirlo...
dejando un poco atrás la razón, los miedos y la vergüenza.
lunes, 29 de abril de 2013
LA SENSIBILIDAD DE KESSLER...
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